Antes de conocer a David, había llegado a un punto en mi vida en el que me encontraba totalmente descentrada y perdida. Con su paciencia y cariño, David me ha ido enseñando poco a poco  que yo soy un ser único y valioso y que tengo las herramientas para cambiar las cosas y conseguir todo aquello que me proponga. Mi vida ha dado un giro total.

Ahora soy capaz de responsabilizarme de mis actos y enfrentarme a la vida sin miedo. Ya no me saboteo a mi misma continuamente y me trato con respeto y amor incondicional. Ha sido una experiencia que me ha aportado mucho alivio, además de comprensión hacia mi misma y hacia todos los que me rodean. Ahora percibo el mundo de una manera totalmente distinta.

Gracias David.