Comencé mis sesiones siendo un poco escéptica en esto el coaching. Entonces, cualquiera podría preguntarse: ¿y para qué ibas?. Pues la verdad es que me encontraba muy mal, problemas de pareja y un entorno laboral difícil al que no sabía cómo enfrentarme. En esa situación supongo que te aferras a lo que sea. Lo intenté con él y mi sorpresa fue que es eficaz.

Soy una persona muy poco reflexiva y él me ayudó a serlo un poco más.
Siempre tenía una necesidad de llevarme bien con todo el mundo y evitar conflictos como fuese y ahora he entendido que eso iba contra mi propia libertad.
He descubierto que detrás de gente que te hace la vida imposible hay debilidad y problemas internos no resueltos.
Sé que tengo que seguir caminando por la senda de querermde más y creer en mis posibilidades. Estoy en ello y eso me ha dado tranquilidad. Aunque todavía tengo mucho que andar en este sentido.

Tengo que aprender a conocerme más para saber en todas las situaciones qué es lo que quiero hacer o ser. A veces ni siquiera sé discernir qué elegir porque estoy acostumbrada a decidir teniendo demasiado en cuenta aspectos externos a mi.
Lo más destacable de mi experiencia es que siento una mayor paz interior y relativizo más muchas cosas que me ocurren.