APRENDI A ACEPTARME A MI MISMA

Toda mi vida se trataba de una continua lucha y enfado conmigo misma cada vez que cometía errores  cotidianos o simplemente elegía caminos que no me hacían realmente feliz. Me sentía culpable muy a menudo por no cumplir las necesidades de los demás y sentia miedo de perderles y de no tener su protección y respeto. Tenía hasta miedo de actuar por si no iba a dar a los demás lo que esperaban de mi.

Con mis amigos y pareja  por miedo no decía claramente lo que necesitaba y en el trabajo sentía miedo de actuar por si no iba a dar la talla. No sentía mi vida en primera persona y no me empleaba nunca afondo en cumplir mis objetivos, mis sueños. Me sentía paralizada y no disfrutaba realmente de nada.

El desorden de mi vida,  y la indecisión  me llevaron a David. Elegí a David como coach por todas las buenas referencias que tenía de él, y no me equivoque para nada, gracias a las sesiones de coaching aprendí a cumplir mis objetivos con esperanza e ilusión, ahora  puedo ver siempre en la oscuridad un rayo de luz. Gracias al coaching pude comprobar que, a pesar de no ser perfecta y seguir equivocándome, soy también un ser humano como todos los demás, que lucha cada día por cumplir sus objetivos. Sin el apoyo de David no hubiera podido elaborar un mapa de mi vida ni clarificar cuales son mis verdaderas ilusiones, sueños y objetivos en todos los ámbitos de mi vida.

Espero que este testimonio sirva a otras personas para cumplir lo que necesitan para ser realmente felices. Consejo: “Si nunca te paras a pensar en ti, estarás perdido en un gran océano sin saber que isla es la que te hace realmente feliz”. Con mucho cariño, Mercedes.